Después del
Campeonato de España, mis sensaciones fueron mejorando, quizás
fruto del estimulo del título de campeón, y tomé una decisión que
tenía planteada hace tiempo. Un cambio de entrenador. Tras 3 años
trabajando juntos, notaba que faltaban aspectos importantes a cubrir
en mi preparación y tome esta importante decisión a mitad de
temporada. Es un paso que cuesta dar, espero que sea por mejorar. Así
que afrontaré la recta final del año siendo mi propio entrenador.
No tenía
muy claro si acudir a Holanda así que 10 días antes de la Copa del
Mundo decidí hacer un test de potencia de 20 minutos, logré el
segundo mejor resultado de mi vida. Empujado por los datos, me animé
al viaje aunque ese esfuerzo previo me podía pasar factura.
Acompañado
de mi buen amigo Chema Del Valle, maestro del tenis de mesa,
arrancamos con la autocaravana a finales de Junio dispuestos a cruzar
media Europa. Una paliza de viaje que realizamos en dos días. Al
llegar, conocimos a un grupo de jugadores de ping pong que nos
invitaron a sus instalaciones. Que bien lo pasamos.
La Copa del
Mundo de Emmen tenía la mayor participación de deportistas a las
que he acudido, en mi categoría competíamos más de 40 handbikers,
los mejores del mundo. La contrarreloj se disputaba el 30 de Junio,
por un trazado plano, para atletas de potencia, sin curvas peligrosas
y aceptable en su longitud. Dos vueltas a un circuito de 8,6 km para
realizar un total de 17,2 km.
Estaba
mentalizado en hacerlo bien, ilusionado con volver a estar entre los
10 primeros pero mis sensaciones no fueron buenas en ningún momento
de la contrarreloj. Logre un puesto 21 de 42 participantes. No fui
capaz de mantener los vatios movidos hace 10 días, de hecho los
reduje bastante. Al llegar a casa, encontré la explicación, acudí
a Holanda con una infección de orina, algo bastante usual en la
lesión medular. Sin duda creo que cuando estas en forma y realizas
un gran esfuerzo, tus defensas se reducen y estamos más expuestos a
cualquier infección. El test, 10 días antes de la carrera, me pasó
factura. Aprenderé de lo sucedido.
La prueba en
ruta era el sábado 1 de julio, 9 vueltas a un trazado de 7,1 km
hasta completar un total de 63,9 km. Intenté llegar pronto a la
salida pero me situé entre los últimos del pelotón. Siempre llego
unos 20 minutos antes pero en esta ocasión no fueron suficiente,
algunos llevaban más de 50 minutos de espera. No entiendo que se no
se realice un orden de llamamiento según resultados del día
anterior pero las cosas son como son.
Salí fuerte
y adelantando rivales hasta que alcancé un grupo donde rodaba
cómodo. Existía bastante colaboración en los relevos y logramos
unas medias altas de velocidad. Me sentía bien, estaba disfrutando,
cosa que no experimentaba desde hace mucho tiempo en una prueba en
ruta. Al sprint, terminé segundo de mi grupo y repetí el puesto de
la contrarreloj, 21 esta vez entre 44 atletas. La valoración fue
positiva, debo seguir puliendo errores de principiante, después de
un viaje tan largo, no puedo llegar tan justo a la salida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario